El presidente de Paraguay, Federico Franco, tomó la tribuna ayer (28) en la 67ª Asamblea General de las Naciones Unidas para reclamar la suspensión de Paraguay del Mercosur y de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur). En su discurso, Franco denunció que los países vecinos violaron el principio de no intervención al asumir el papel de “guardianes de la democracia”. Según él, la destitución de Fernando Lugo del poder se llevó a cabo de acuerdo a la Constitución del país.

En junio, los líderes políticos del Mercosur y de la Unasur decidieron suspender a Paraguay de ambos grupos, argumentando que la destitución de Lugo violó el orden democrático. En su discurso en la Asamblea General, la presidenta Dilma Rousseff afirmó que los países sudamericanos preservan la democracia asociada con la integración en la región.

Sin embargo, Franco reaccionó ante la sanción impuesta por los países vecinos a Paraguay. “Paraguay se encuentra en una difícil situación internacional creada por los países vecinos del Mercosur y de la Unasur”, declaró el presidente paraguayo. La suspensión debería terminar el 21 de abril de 2013, cuando se llevarán a cabo elecciones presidenciales en Paraguay.

Para el presidente de Paraguay, el Mercosur y la Unasur han adoptado sanciones contra Paraguay, pero “no están autorizados a ejercer el derecho de defensa expresamente previsto en los instrumentos internacionales invocados para imponer las sanciones”. Según él, se han violado tratados internacionales.

Franco afirmó que Paraguay no ha cometido “una sola violación”. “Paraguay no acepta la intervención en sus asuntos internos por parte de potencias extranjeras”, dijo. “Pido a todos los líderes políticos que reflexionen y encuentren una manera de reconstruir el proceso de integración sudamericano, que ha sido afectado”.

El presidente reiteró que el proceso de juicio político contra Lugo fue aprobado por la Cámara y el Senado de Paraguay. “Fue una decisión para poner fin a una grave crisis política que amenazaba a la nación”, resaltó. “Asumí el cargo de presidente de la República porque, como vicepresidente, era mi deber hacerlo”.