El Brasil tiene una larga historia de comercio tradicional con Polonia y, aunque no ha habido un crecimiento muy significativo, ha habido una evolución positiva. “En los últimos años, ha habido un aumento, pero no es un mercado que tenga la importancia que ambos países podrían tener. Se han mantenido por debajo de su potencial”, afirma el vicepresidente ejecutivo de la Asociación de Comercio Exterior de Brasil (AEB), Fábio Martins Faria. Durante la crisis en Europa, Polonia aparentemente se vio menos afectada, según el vicepresidente. “Polonia tuvo un mejor desempeño que sus socios de la Unión Europea. Pero decir que estaba fuera de la crisis es difícil, de alguna manera fue afectada”, afirma.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Comercio Exterior (SECEX/MDIC), el total general de productos exportados a Polonia de enero a noviembre de 2013 fue de US$ 381.645.547. En 2012, ese total fue de US$ 371.173.333. La cifra de 2013 representa un aumento del 2,2% en total. Entre los principales productos exportados al país europeo se encuentran los minerales de cobre y sus concentrados, tabaco y bagazo de otros residuos sólidos de la extracción de aceite de soja.
En cuanto a las importaciones, Brasil importó de enero a noviembre de 2013 un total de US$ 751.398.078 en productos polacos, lo que representa un aumento del 33,15% en comparación con el año anterior. Entre los principales productos importados se encuentran el coque de hulla, el lignito o la turba, la goma de estireno-butadieno en otras formas primarias y los productos de telefonía.
Los productos brasileños tienen una estructura de costos muy elevada, lo que hace que nuestros productos sean caros, observa Faria. “Hay impuestos, burocracia y una logística aún deficiente”, señala. El vicepresidente cree que con la depreciación del real, los productos brasileños tienden a ser más competitivos, ya que se vuelven más baratos. “Esto beneficia las exportaciones brasileñas y reduce la atractividad de las importaciones. Sin embargo, Brasil seguirá necesitando importar productos de allí, ya que la industria sigue necesitando estos productos”, destaca.
Al estar dentro de la Unión Europea, gran parte del comercio que hace Polonia es con otros países europeos. “Pero también tiene la posibilidad de expandir el comercio con otros mercados”, señala. Faria cree que los países tienen el potencial de aumentar su relación comercial cuando se firme el tratado entre el Mercosur y la Unión Europea. “Es una perspectiva favorable, ya que llevaría a una reducción de aranceles”, concluye.
